Skip to main content

Guillermo del Toro no solo dirige películas: construye mundos. Desde sus inicios en Guadalajara hasta convertirse en uno de los cineastas más respetados del planeta, su carrera ha sido una exploración profunda de lo fantástico, lo temible y lo profundamente humano. Su cine nos recuerda que, muchas veces, el verdadero monstruo no es quien lo parece, y que la belleza puede habitar en las formas más inesperadas.